Shun. Caballeros del Zodiaco, Andrómeda
Cuando hablamos de series míticas de animación y anime, no podemos dejar fuera a Los Caballeros del Zodiaco, una serie emitida en España del 1986 hasta 1989 con un total de 114 episodios.
En mi caso y en el de mucha gente nacida en los 80, esta serie fue uno de los primeros acercamientos al mundo del anime (animación japonesa) y a este estilo de dibujo y narración tan particular. Esta serie nos narra lo ya contado en los manga (cómics japoneses) de este título, las historia de unos jóvenes guerreros (caballeros o santos) que luchan para proteger a la humanidad de las fuerzas del mal que quieren dominar la Tierra. Los protagonistas principales son los denominados Caballeros de Bronce debido al material con el que está hecha cada armadura, armaduras que se inspiran en las constelaciones y cuya energía procede del cosmos.
La serie sitúa como protagonistas principal a Seiya, caballero de Pegaso, Shiryu, caballero del Dragón, Hyoga, caballero del Cisne, Ikki, caballero de Fénix y el caballero que nos ocupa ahora: Shun, caballero de Andrómeda.
Shun es hermano menor de Ikki. Fue a entrenar a la isla de la Reina de la Muerte pero su hermano le cambia el lugar para conseguir la armadura del Fénix por lo cual Shun va a la isla de Andrómeda a la cual iba a ir en principio su hermano Ikki. Allí tuvo que soportar un duro entrenamiento en condiciones extremas a las órdenes y directrices de su maestro Albiore de Cefeo, un caballero de plata muy poderoso.
La armadura que usa Shun representa una mujer, la constelación de Andromeda. Según la mitología griega Andrómeda era hija de reyes y esposa de Perseo. En una ocasión la madre de Andrómeda, Casiopea provocó la ira de Poseidón que decidió inundar la tierra y enviar a un monstruo marino, el Kraken, para que acabase con los hombres y el ganado. Su padre Cefeo solo podía hacer una cosa: entregar a su hija al monstruo. La ató con cadenas a unas rocas cerca de la costa. Ahora es cuando entra en escena Perseo que, tras convertir a la criatura en piedra gracias a la cabeza de Medusa, logra rescatarla y pide su mano. Pero la madre de Andrómeda había prometido ya a su hija con el príncipe Fineo, por lo que Perseo tuvo que luchar contra él y consiguió casarse con su amada.
Debido a tal mitología, Shun con la armadura de la constelación de Andrómeda usa cadenas como armas simbolizando las cadenas que tuvieron a Andrómeda atada a las rocas a merced del monstruo. Son dos cadenas muy poderosas, la que sostiene con la mano izquierda la usa para defenderse y termina en una bola. Con esta cadena puede generar descargas eléctricas, usarlas como barrera defensiva y múltiples técnicas de defensas reforzadas por el poder del Cosmos. Dicho poder lo usa también con la cadena de su mano derecha terminada en punta que la usa para realizar ataques como el llamado Cadena Nebular, mediante el cual la cadena se dividen en varias y atacan con gran poder. El ataque Onda del Trueno, con el poder de un rayo y es efectivo incluso en otras dimensiones paralelas.
Aún si Shun se quedara sin sus cadenas, tiene otro poder: la Corriente Nebular capaz de crear un remolino de aire que lo rodea y paralizar a su enemigo, hasta formarse una Tormenta Nebular que arrasa todo a su alrededor. Este ataque no procede de las cadenas sino del cosmos.
Todos los caballeros del Zodiaco dan mucho juego a la hora de «maniqueizarlos» debido en parte a lo estilizado de sus diseños y Shun todavía con más razón. Todo ha sido realizado con pasta de porcelana y las cadenas son de acero cromado cuyas puntas han sido realizadas también con dicha pasta.
Este ha sido un encargo de un gran conocedor de esta saga, Miguel Angel Sánchez, coleccionista, profesor y podcaster del canal frikilosofía. Miguel Ángel ha tenido la deferencia de proporcionarme gran parte de la información para esta reseña.