Las Tortugas Ninja. ¡Qué recuerdos! Lo que me gustaba esa serie animada de televisión de finales de los 80 y principios de los 90.

Nos contaban las aventuras de 4 tortugas que sufrieron una transformación debido al contacto con el mutágeno o también llamado los «mocos verdes».  Esta sustancia mutó sus cuerpos y los transformó con el tiempo en 4 criaturas humanoides con ADN de tortuga que fueron entrenadas por un maestro ninja Llamado Hamato Yoshi que a su vez tambíen mutó con el ADN de una rata y se convirtió en Splinter o maestro Astilla.

Las tortugas recibieron nombres de maestros del renacimiento, Michelangelo, Donatello, Leonardo y Raphael. Con sus conocimientos y entrenamiento en el arte ninja, y con un buen trozo de pizza, combaten el crimen en nueva York a manos del Clan del Pie comandados por el malvado maestro de las cuchillas, el despedazador o Shredder… Menuda historia.

Pero lo más rocambolesco de todo es que aún a mis taitantos años me siguen gustando estas Tortugas Ninja Mutantes Adolescentes como el primer día y ya tenía ganas de maniqueizar una de ellas.

Por supuesto he elegido a mi favorita desde pequeño, el antifaz rojo, hábil en el manejo de los sais, carácter independiente, impulsivo y celoso, nos referimos al gran Raphael. Una personalidad que le ha costado más de una pelea con sus hermanos sobre todo con Leonardo, pero es el primero en dar su vida si es necesario por ellos debido a su espíritu de sacrificio. No obstante, aunque parezca rabioso y uraño, puedes ser su amigo a cambio de un buen trozo de pizza.